Tardes de verano de calor y fresco, gastando la calle con las zapatillas o encima de un monopatín.
Llenas de burbujas de chicle sabor a fresa, controlando la hora de vuelta a casa para econtrar la cena lista.
Mosquitos y olor a repelente.
Una tarde de viernes en los 80.
Crear y programar contenido para redes sociales, dibujar para ti y para mí, mimar a mis gatis y comerme un helado de coco y caramelo escuchando podcast…
Así son hoy mis tardes de viernes.
¿Cómo es la tuya?